Blog personal, Acerca de las vivencias ocurridas en mi vida, o de otras personas, y cosas que me interesan o me gustaría comentar.

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lunes, 5 de abril de 2010

15. La vida de un repartidor de leche (tercera parte)

Fue un día de trabajo en la Dos Pinos bastante normal, ya era el 15 de Marzo de 1989.

Toda la ruta transcurrió bastante normal, no hubieron atrasos ni nada extraño, y la ruta era la de Desamparados centro.


Llegamos a la planta a descargar canastas, y luego cargar el producto y la leche para el siguiente día.

Ese día era una ruta corta, por lo que ya era como la una de la tarde, y estábamos terminando de cargar la última canasta para poder irnos para la casa.

Se cargó lo último, agarré mis cosas y me despedí de mis compañeros.


Cuando ya iba pasando el portón de salida de la planta, recordé que algo se me olvidó en el camión, la verdad es que hoy, no recuerdo que fue, pero me devolví hacia donde habíamos terminado de cargar.

Para suerte no se había ido el camión aún, así que pude sacar lo que había dejado olvidado.

Cuando ya me disponía a irme de nuevo, el chofer me indica que nadie cerró la puerta del cajón, que lo fuera a cerrar.


La puerta se amarraba a una cadena, para que esta no se cerrara cuando íbamos viajando de negocio en negocio.

Me subí a la grada del camión a quitar la cadena y cerrar la puerta, cuando de repente el camión empieza a echarse para atrás, y en dirección a otro camión.

Todo pasaba al mismo tiempo y muy rápido…yo trataba de quitar la cadena y cerrar la puerta, mientras que el camión iba hacia atrás en dirección a otro, y parecía que iban a chocar…y yo estaba en medio de los dos.


La puerta que estaba intentando cerrar golpeó la parte del otro camión, yo me hice tirado, pero no lo suficientemente rápido…la puerta y el costado del otro camión, me prensaron la mano.

Al menos eso sentí yo, ya que fue como un majonazo algo desagradable.

Al momento no dolió mucho…solamente dije:

-Puta….que majonazo más feo…


Seguí viendo la situación que acababa de ocurrir, la puerta golpeada, el otro camión también… y luego me voy viendo mi mano izquierda…

Empecé a ver un reguero de sangre por toda la mano, que me recorría por toda la camisa, el pantalón y los zapatos, y comencé a comprender que me había cortado un dedo, ya que solamente distinguía un pedazo de hueso saliendo de entre la carne ensangrentada, y el otro dedo de a la par, estaba totalmente guindando, como haciendo la forma de una letra T, con otro pedazo de hueso salido.

Otros dos dedos, estaban completamente aplastados y reventados, con la uña desencajada.


El único dedo que se salvó fue el dedo pulgar, a ese no le pasó nada.

En cuestión de segundos, me di cuenta que me había despedazado los dedos de la mano izquierda, y que me había amputado uno, y otro estaba guindando…pero también que no fue mucho lo que me arranqué…eso me mantuvo tranquilo y sereno ante tal desgracia, lo que si me hizo sentir mal, fue recordar el ¿como diablos iba a tocar la guitarra?...ya que esos eran los dedos que hacen las notas.

Toda la gente que estaba cerca del lugar se puso a mí alrededor, y me llevaron a las oficinas de la planta, en busca de alguien con un vehículo, para que me llevara al hospital.


La verdad, es que no me sentía como que me iba a morir, me ardía toda la mano, y salía borbotones de sangre por todo lado, pero me sentía bien, solamente algo triste, así que me llevaron caminando, solamente con la mano hacia arriba para no desangrarme más.

Al llegar arriba, en las oficinas, todas las mujeres al verme entrar, se pusieron muy asustadas, no hubo que decir mucho para que llegara un muchacho que se ofreció llevarme al Hospital Calderón Guardia.


Ya en el carro, el hombre iba todo asustado, corría como loco, y me preguntaba a cada rato por mi salud, yo le respondía que estaba bien, que si me dolía un poco, pero que le estaba llenando todo el carro de sangre, eso a el no le importó, estaba como atacado porque había una presa de carros, y no lo dejaban pasar, entonces me decía….saque la mano por la ventana, para que vean que la vara es en serio….la saqué, y empezó a gritar y pitarle a todo el mundo que se quitaran y lo dejaran pasar, que era una emergencia, mientras yo les enseñaba la mano hecha una desgracia.

Al final parece que si funcionó la cosa, porque varios se hicieron a un lado.


Cuando llegamos a emergencias, vi que había una larga fila de gente esperando entrar, pero el me llevó, y decía: “usted va de primero”, e iba abriendo campo, y los que hacían fila me veían asombrados con mi mano, mientras me les colaba a todos y nadie me decía nada.

Al llegar a una sala, como de curaciones, o algo así, llegó un doctor, me ve la mano, y empieza a preguntarme cosas, y luego se decide tomarme la presión.

Una vez que la tomó, la ve y me dice: Ah no, si usted está muy pura vida…espérese aquí mientras atendemos a una muchacha de primero.

Así que me senté, y esperé…y esperé, y esperé…


La mano me seguía doliendo, pero ya había dejado de sangrar, ya hasta se estaba secando la sangre había pasado como una hora y solamente mantenía mi mano en posición hacia arriba…y la muchacha que estaban atendiendo de primero, desde donde yo estaba se oían sus gritos y lamentos a más no poder.

Gritaba y gritaba, y a ratos lloraba…no se ni quién era, al rato sale un enfermero o Doctor, y vuelve a preguntar por mi estado…


Yo solamente le dije que estaba bien, solo que ya empezaban a rondarme las moscas encima de los dedos, que seguro ya se estaban pudriendo o algo así, luego le pregunté por la muchacha, y me dice que estaba trepada sobre un árbol, y se cayó, pero cayó sentada encima de un alambre de púas, y que la estaban cosiendo en ese lugar…


Al poco tiempo, llegó un compañero mío de la Dos Pinos a entregar algo en una bolsa de papel…era mi pedazo de dedo que se habían encontrado en la empresa.

Luego que se fue, lo sacaron y dijeron….Ah no, si esto ya no sirve para nada, está todo majado y despedazado, y ni en hielo lo trajeron….no, esto ni para las bocas sirve ya…

Y luego lo botaron con todo y bolsa en un basurero normal de ese lugar…ahí terminó su existencia mi dedo anular izquierdo.

Yo les dije que seguro eso mismo le iba a pasar a mi dedo medio, ya que se veía igual, solo que guindando.


En eso sale la muchacha que estaban cosiendo, estaba llorando… se me queda viendo…abre los ojos y la boca, y continúa caminando…pero al menos ya iba completamente muda.


Ya era mi turno…me acostaron en una camilla, y me dijeron que me iban a anestesiar los dedos.

Todos los que trabajábamos en la Dos Pinos, teníamos unos cayos en las manos, muy gruesos y duros, de tanto estar jalando las canastas plásticas, así que yo no era la excepción.


Les costó un mundo meter la aguja, en los lados de cada dedo, y cuando la lograban meter, empujaban tan duro, que me atravesaba por completo el dedo, y tenían que volver a sacar la aguja y empezar de nuevo.

Un poco de anestesia en cada lado, de cada dedo, o sea, que era en 8 partes, ya que el dedo pulgar no lo iban a tocar.

Al momento empezó a hacer efecto la anestesia, me acuesto, y estiro la mano, y pusieron un biombo para no poder verla yo.

Empezaron con el dedo que estaba totalmente amputado, y que ya habían tirado a la basura.


Sabía y sentía que estaban cortando el pedazo de hueso salido, ya que sentía donde lo jalaban, y escuchaba donde lo cortaban, como si alguien se estuviera cortando las uñas de los pies.

Creo que también como que lo pulieron o algo así, luego empezaron a coser el dedo…y empecé a sentir algo caliente que me bajaba por la mano, seguro sangre.

Cuando terminaron con ese, siguieron con el dedo que estaba guindando…lo malo es que empecé a sentir todo lo que me hacían.

Yo les dije que creía que ya estaba pasando el efecto de la anestesia, porque estaba sintiendo todo, que le pusieran más.


Pero me dijeron que esa anestesia solo duraba 20 minutos, y que si me ponían más era muy peligroso.

Veinte minutos habían durado solo con un dedo, y faltaban 3 más….

Nunca les dio la gana de anestesiarme más, así que los otros dedos, sentí todo el dolor de cómo cortaban y pulían un hueso, y como cosían los otros en carne y sangre viva.

Recuerdo sentir como si una sierra caliente estuviera cortando mi dedo lentamente, mientras un líquido caliente y espeso me bajaba por toda la mano.


El dolor y ardor era espantoso, yo solo les gritaba que no cosieran tanto esos dedos, que los dejaran así, que se iban a curar solos, pero ellos me decían que tenían que quedar bien cerradas las heridas, que no eran solo unas cuantas puntadas, así que ni se detenían, ni me daban más anestesia…solo me quedaba morderme el cuello de la camisa, que era lo que tenía más cercano, eso me ayudó mucho a aguantar y a no mentarles la madre.


No recuerdo el tiempo total que estuve ahí, pero cuando me dijeron que ya habían terminado, y me levanté de esa camilla, me sentía todo débil, mareado, adolorido, sudado, y me zumbaban los oídos.

Me vi la mano vendada, y me dijeron que el otro dedo lo habían terminado de cortar, que me fuera a la farmacia por unas pastillas para el dolor, y luego vino una enfermera a ponerme la vacuna contra el tétano, esa ni la sentí, luego de tanto dolor, que hasta de pie me la puso en un santiamén.


Las pastillas me dijeron que en una hora me las daban, pero no me esperé, y me vine para la casa en un taxi.

Le conté la historia a mi mamá, se puso a llorar, pero le dije que no había sido mucho, que eso era normal.

En la noche, me dio calentura, la mano se me hinchó como un sapo, y no podía ni moverla.


Me acosté temprano, y esa fue la primera noche de un montón que se iniciaban, que no podía dormir feliz, ya que mientras dormía, la mano se me cerraba sola, y era tanto el dolor, que a cada rato me despertaba.

Al otro día, me dolía todo, estaba más débil y cansado, si me tocaban el hombro, me dolía la mano, si me pegaba en la cabeza, me dolía la mano, si me tropezaba, me dolía la mano….era una desgracia que me iba a seguir por varios meses.

Me soñaba con mis dedos, que estaba todo normal, y que habían crecido, pero al rato me despertaba cuando la mano se cerraba sola.



La tarjeta de citas

Cuando me quitaron las vendas, el viento hacía que me ardiera la mano, y siempre con la mano hacia arriba, como enseñándola al mundo.

A veces no me importaba mucho, en otras ocasiones me daba rabia, pero tenía que seguir.

Al mes me quitaron los hilos, y sentí como si hubiera andado un alicate de perro aprisionando mis dedos por varios días, y que luego me lo quitaron…sentí un gran alivio.


Pero al cabo de unos días, siempre me seguía doliendo el dedo medio, y se me estaba hinchando, y lo veía como podrido y con pus.

En una cita a curaciones que tenía que ir, les conté, y vieron que todavía quedaba un hilo en el dedo, solamente que le había crecido piel encima.

Tuvieron que romperme otra vez el dedo, hacer un hueco y sacar ese hilo a como diera lugar, ya que me estaba matando lo que quedaba de dedo.

Me costó volver a agarrar las cosas, la mano estaba toda pendeja, no me aguantaba ni un vaso de agua…el día que pude alzar un litro de leche, estaba feliz, ya que pesa un kilo.

Las citas y curaciones



Dos meses estuve incapacitado, y luego volví al trabajo….

El frío de los camiones, las canastas duras y frías, aprender a trabajar de nuevo en ese ambiente, me fue muy difícil por los dolores constantes.

A cada rato pegaba los dedos en todo lado, y era un dolor insoportable, que hoy en día, aún sigue doliendo si los pego, solo que con menos frecuencia.

Pude volver a tocar la guitarra, pero podía hacer menos notas, ya que no me alcanzaban los dedos, pero me divertía siempre con el grupo que teníamos.

Foto cuando tenía los dedos de la mano izquierda


Los demás dedos estripados, los cosieron y quedaron bien, solo al tiempo se les cayó la uña, que anduvo por varios meses toda morada y llena de coágulos de sangre, pero luego les volvió a crecer.


En esta foto aún andaba con las uñas moradas

Como consejo…pelar bien el ojo en lo que estén haciendo siempre, ya que un abrir y cerrar de ojos, la vida de uno puede cambiar o dejar de existir.





jueves, 1 de abril de 2010

Me estoy mudando

Me estoy cambiando de casa, voy para esta:


La siguiente secuencia del repartidor de leche (tercera parte), creo que va a estar en ambas direcciones.
Cualquier cosa me avisan....
Luego le pongo fotos a los antiguos Post, de ambos lados.
Un saludo a todos...siempre estaremos en contacto.
Atte:
Carlos Cascante